Cronoteo es laico
Ya te he contado que Cronoteo no creía en los dioses creadores del mundo y de sus leyes. También que había buscado una religión que le guiara en su Tiempo y le resolviera todas sus dudas existenciales, sin encontrarla. Aunque reconocía la bondad de muchos de los mandamientos, prescripciones y consejos de la mayoría de las religiones, las evidencias científicas de su Tiempo le impedían aceptar la posibilidad de la reencarnación, la existencia de un alma independiente del cuerpo o la necesidad de abstenerse de cortar el papel higiénico en sábado, entre otras muchas cosas. Por otra parte, Cronoteo era reacio a aceptar “verdades” procedentes de libros sagrados de procedencia incierta o de sueños de iluminados. Sin embargo, reconocía que fueron una solución para la convivencia de los seres humanos en épocas en que el conocimiento científico era muy limitado. Algunos acusaban a Cronoteo de inmoral y falto de ética por ser laico. Pero lo hacían porque desconocían la existencia del códig